-Señor se ha confirmado los Wyvern sus raíces sin son Elendid
-¿Qué hay de esos Kraken?
-Su rey está en crisis, debido a la traición de su general, un sucesor de los guardianes de los NeuSou
-Perfecto
Doy el último sorbo de vino de aquella copa de oro depositándola en el brazo de aquella soberbia silla de sauce e incrustaciones de piedras preciosas. Levantándome salgo de aquella penumbra que me protegía aquel rincón dejando iluminar mi semblante, conjunto con aquella armadura oscura, mostrando con gran vitalidad el escudo de Morduck, el antiguo y sanguinario pueblo del jinete nigromante.
Mirando con gran altivez a mi vocero explayo una sonrisa siniestra acercándome más hacia él
-Olvidaste un detalle mi leal Rowen
-Dígame señor
Al chasquido de mis dedos cuatro hombres lo asaltan de la penumbra sosteniéndole con fuerza su cuerpo tembloroso y desesperado en escapar. Retiro de mi cinto mi espada aproximándome hacia mi vocero amenazando con la punta de esta su cuello
-Afrodita Feür Luthien Valois
Hago un ademan a que lo alcen del piso y abran sus piernas y tomando una lanza de uno delos guardias que custodiaban mi trono le penetro el arma desde su cavidad, atravesándole todo el interior de su cuerpo con gran lentitud, disfrutando de los gritos desgarradores y aquel escurrir abundante de ese exquisito liquido carmín. Pronto vería la punta de aquella lanza sobresalía de su cráneo y no pude evitar sonreír tan placenteramente lamiendo mis dedos bañados en sangre
-Destácenlo y ásenlo para que se lo den de comer a mi querida jauría. También vayan movilizando a los Krurnier para que se larguen de cacería a Wyvern y busquen a esos imbéciles d guardianes de NeuSouu mientras yo, iré a darle mis “afectuosos” saludos a mi querido amigo rey Kraken
Relamo mis labios que se encuentran un poco manchados de sangre, esquivando a mis guardias dirigiéndome a mis aposentos subterráneos para colocarme mis mejores galas. Muerdo un poco mi labio inferior recordando aquel rostro hermoso impregnado de un gran odio cuando me bañe de sangre de los cuerpos deliciosamente inertes de su hermano y mentor
- Afrodita deseo lamer tanto tu cuerpo sangrado y frágil… espero no te enceles de saber que mi atención también están en Saga Wyvern
Con una risa estrepitosa que resuena en los ecos de aquellas paredes de piedra dejo que la oscuridad me arrope
-¿Qué hay de esos Kraken?
-Su rey está en crisis, debido a la traición de su general, un sucesor de los guardianes de los NeuSou
-Perfecto
Doy el último sorbo de vino de aquella copa de oro depositándola en el brazo de aquella soberbia silla de sauce e incrustaciones de piedras preciosas. Levantándome salgo de aquella penumbra que me protegía aquel rincón dejando iluminar mi semblante, conjunto con aquella armadura oscura, mostrando con gran vitalidad el escudo de Morduck, el antiguo y sanguinario pueblo del jinete nigromante.
Mirando con gran altivez a mi vocero explayo una sonrisa siniestra acercándome más hacia él
-Olvidaste un detalle mi leal Rowen
-Dígame señor
Al chasquido de mis dedos cuatro hombres lo asaltan de la penumbra sosteniéndole con fuerza su cuerpo tembloroso y desesperado en escapar. Retiro de mi cinto mi espada aproximándome hacia mi vocero amenazando con la punta de esta su cuello
-Afrodita Feür Luthien Valois
Hago un ademan a que lo alcen del piso y abran sus piernas y tomando una lanza de uno delos guardias que custodiaban mi trono le penetro el arma desde su cavidad, atravesándole todo el interior de su cuerpo con gran lentitud, disfrutando de los gritos desgarradores y aquel escurrir abundante de ese exquisito liquido carmín. Pronto vería la punta de aquella lanza sobresalía de su cráneo y no pude evitar sonreír tan placenteramente lamiendo mis dedos bañados en sangre
-Destácenlo y ásenlo para que se lo den de comer a mi querida jauría. También vayan movilizando a los Krurnier para que se larguen de cacería a Wyvern y busquen a esos imbéciles d guardianes de NeuSouu mientras yo, iré a darle mis “afectuosos” saludos a mi querido amigo rey Kraken
Relamo mis labios que se encuentran un poco manchados de sangre, esquivando a mis guardias dirigiéndome a mis aposentos subterráneos para colocarme mis mejores galas. Muerdo un poco mi labio inferior recordando aquel rostro hermoso impregnado de un gran odio cuando me bañe de sangre de los cuerpos deliciosamente inertes de su hermano y mentor
- Afrodita deseo lamer tanto tu cuerpo sangrado y frágil… espero no te enceles de saber que mi atención también están en Saga Wyvern
Con una risa estrepitosa que resuena en los ecos de aquellas paredes de piedra dejo que la oscuridad me arrope