Mi mejor...¿amigo?

La ansiedad me carcome y solo puedo mover mi cuerpo de un lado a otro tratando de tocarlo pero..no puedo estoy atado.

Muerdo mis labios y mi cabeza se hace hacia atrás con su contacto en mi cuerpo y mi piel...comienzo a sudar también un tanto.

-s..si Camus...hagámoslo

No puedo responderle mucho, espero que se acomode porque en mi posición es complicado pero quiero cumplir todos todos sus caprichos hoy.

-cu..cuando me desates...voy a...a... Castigarte por esto...aaahhh...mucho

Sigo mordiendo mis labios y esperando su acción para conmigo y el.

Una sonrisa perversa se apodera de mi boca al escucharle.

—¿Piensas castigarme, Shura?— Mis labios succionan y muerden su piel para incitarle un poco mas, mientras continuo bajando y acariciando su cuerpo contra el mio.

No creí que algo como esto fuese tan excitante.

Gateo hasta sus labios y le beso apasionadamente, mordiendo y succionando hasta hincharlos completamente y volverlos mas deliciosos.

Finalmente me aparto y me coloco en cuatro sobre el cuerpo de Shura, dejando mi virilidad cerca de su boca y poniendo la mia cerca de su miembro.

No lo introduzco de inmediato, primero lo restriego contra mi nariz, oliendo su virilidad y los rastros de la pasión que tuvimos hace unas horas, después saco mi lengua y comienzo a acariciarlo con ella.

Un gemido sale de mi boca cuando hace eso... Es tan seductor y travieso que me vuelve loco...

-aaahhh....

Apenas puedo gemir en cuanto lo hace voy a su virilidad como puedo y solo con mi boca puedo darle el gozo que el quiere...muerdo y lamo, succiono y chupo como si algo para vivir se tratara...es algo que no imagine pero que me encanta.

Mi lengua lame toda su extensión hasta hacerlo gritar...quiero que entienda que tiene al mejor amante de todo el santuario...el mas deseable y sagaz... Pero dejare que mis actos se lo digan y solo voy a amarlo mucho en esta ocasión.

Al escucharlo jadear mi deseo se incrementa y los ataques suaves y rezagados que antes daba contra su erección, poco a poco cobran fuerza mientras delineo el tronco con mi lengua y lo adentro en mi cavidad, primero sólo la punta y enseguida el resto de su extensión.

Mi propio miembro es atacado por cosquilleos que revolotean la sangre en mi vientre y me llevan a tomar la erección de Shura con una mano y meterla con mayor fuerza y ansia dentro de mi boca; mis caderas cobran vida y se mueven desesperdamente contra su boca en busca de mayor placer.

Muevo como puedo mi cuerpo contra su boca para estimularme mas...es muy difícil para mí hacer esto en mi condición, pues no me puedo mover mucho pero lo mas que puedo me muevo

-amor...no puedo hacer mucho...aaahhhh

Le muerdo despacio y con deleite quiero que este lo mas caliente que se pueda..

-quiero tocarte...

La fuerza en los cinturones es mas grande...deseo soltarme

Sentir su desesperación me acelera el pulso, y aviva el placer que siento por acariciar y lamer su cuerpo.

Masturbé un poco mas mi virilidad con su boca, y cuando le escuché hablar, una nueva sonrisa perversa se apropió de mis labios. Dejé de masajear su erección con mi lengua y boca, y volví a moverme hacia un lado para trepar de piernas abierta encima de Shura.

Mis manos tocaron la planicie de su abdomen y el torso marcado donde mi saliva y dientes habían marcado. Me acerqué hasta su boca y le susurré en el oído:

—Me encanta cuando me dices amor...— Mi boca profanó la suya, y besé su lengua con lujuria y placer. —Ya tendrás tu turno.— Le incité, con la promesa de dejarme amarrar por él.

Volví a besar su boca y desplazar mis labios y lengua por su torso. Pasé mi lengua por los labios y succioné el miembro de Shura con un poco de violencia, humedeciéndolo más; enseguida lo erguí y lo rozé despacio contra mis gluteos, para luego introducirlo lentamente por mi ano. Dolía, y eso me hizo gritar, pero el dolor era un dolor soportable que también me gustaba.

Apoyé las manos sobre su vientre y fui tomando fuerza y aire para penetrarme con su erección hasta lograr introducirlo por completo, y recostar mi mejilla contra su pecho.

Verlo jugar conmigo es algo que me excita de sobremanera....para luego penetrarse a el mismo... Jugar conmigo dioses nunca creí ver un Camus así..

-con cuidado tontito...aaahhh

Relamo y muerdo mis labios con placer al verlo montado en mi...quiero que enloquezca de verdad

Me detuve un momento, aún apoyado sobre su cuerpo, porque dolía, aunque era placentero, y amaba sentirlo dentro de mi cuerpo.

Mi lengua delineó las curvaturas de su torso, mientras mi cadera cobraba poco a poco vida y le permitía a su virilidad penetrar en mi carne. Me moví suave, pero cadencioso, acariciando con mi cuerpo su miembro mientras le mordia los pezones y jadeaba sobre su cuerpo. Escucharle disfrutarlo era como música para mis oídos.

Aceleré el movimientos de mis caderas, y abrí un poco más mis piernas para hacerle mayor espacio; me moví un poco más fuerte y disfruté de penetrarme con su erección durante algunos momentos.

Finalmente me salí de su cuerpo y mientras desataba sus piernas y sus manos, iba a dejando besos sobre su cuerpo y labios.

—Eres libres.— Le dije jadeante.

Me soltó y se levantó, sólo sonreí y lo tomé de la cadera.

-quieres que te castigue verdad cariño?

Sonrió y le beso mientras lo acaricio con paciencia, muerdo su piel y le recuesto conmigo sobre su cuerpo

-de nuevo serás mío? Estas listo?? Voy a maltratarte un poco amor...

Muerdo sus labios

Mis brazos se enredan sobre su nuca y mis piernas entre su cintura, haciéndole espacio para que se acomode sobre mi cuerpo caliente... Caliente, no mas frío. Aprendí a controlar mi cosmo gélido. Mi respiración aún es agitado, y el revoloteo de placer en estómago pugna por continuar el rito en su liberación.

—Soy tuyo, Shura...— Respondo, disfrutando el mar de sensanciones que sus marcas provocan en mi boca y lamiéndolas para catar su sabor. —Haz lo que quieras.— Me pregunto qué es lo que piensa hacer conmigo.

Queria amarrarlo pero lo dudo ahora, me gusta que me rasguñe y me arañe,. entonces solo sonrio y le beso donde estamos.

-Lo se Camie.. solo quiero que te sientas amado por mi aunque sea un tanto, quiero que sientas lo que es hacer el amor de verdad.

Me coloco entre sus piernas y le beso, muerdo sus labios y cuello, esta sudando pero eso no quita que lo acaricie como se debe, opto por acariciarlo y mimarlo...

-Me encantas...me encantanas....

Susurro mientras me lo como... su sexo esta algo hinchado... lo toco con cuidado

Sus caricias me encantan, y llevan a mis labios le besen y que mis manos le acaricien por aquellas zonas donde mis dedos pueden filtrarse.

Deslizo mi piel por la suya y jadeo con su cercania y con sus besos.

—Contigo todo ha sido hermoso... Y siempre me siento amado por ti...— Me retuerzo ante sus caricias y beso y muerdo su cuello y la piel que tengo cerca de su cuerpo, acariciando su piel con mis manos y amándolo tan intensamente como nuestra primera vez.

Acarciarlo en la cama es algo que no pense que pasara por segunda vez, me esta mostrando la cara oculta de Camus, donde nadie jamas habia puesto atencion, a mi me encanta y quiero seguirlo tocando siempre...y ahora que puedo lo hare sin pudor.

-me enloqueces Camus... siempre lo has echo...

Sonrio y voy a su virilidad para tocarlo, acariciarlo y tenerlo en mi cuerpo, esta caliente... tiene la piel caliente y los labios enrojecidos de placer... me encanta.. me vuelve loco

Comienzo a restregar su sexo con el mio...

Shura me pone de una forma que nunca consideré... Él había sido hasta hace poco mi mejor amigo y la razón por la que pretendia marcharme a Siberia porque para mi era mi imposible; sin embargo, sólo él ha podido llevarme a este nivel de placer y estado de perversión que nunca creí.

Su cuerpo restregado con el mio me obliga a apretar los labios porque realmente disfruto su contacto, su calor y su cercania. Mis manos le acarician y se aferran a su cuerpo tibio y desnudo, palpando su piel y sintiéndolo de este modo tan mío... Porque de cierta forma es mío.

Me abrazo de él y me impulso para darnos vuelta en la cama y dejarme nuevamente sentado sobre su cuerpo

—Creí que pensabas castigarme...— Me porto un poco mal y le muerdo los pezones. —tienes al maestro del hielo hecho fuego por tí

Lo tomo de la cintura con ambas manos para luego una de mis manos ir a su virilidad...

-Si amor...es lo que quiero, pero tu me pones trabas que no se como reaccionar.

Me logro sentar con el encima mio para besarle y atraerle a mi pecho.

-Es mi turno o quieres hacerme algo mas...quiero que grites mi nombre -le digo susurrante a su oido- preso de placer por mi culpa

Ataco su cuello con mordidas y besos...

Las mordidas en mi cuello me obligan a jadear, y a aferrarme contra él, preso de esa sensación.

Mi piel quema con sus caricias y me obliga a hacerle espacio allá por donde desee ir con su lengua.

—Perdóname... Me portaré bien...— Murmuro, restregándome contra su cuerpo en busca de mayor placer.— sólo quiero complacerte...— Abandono el peso de mi cuerpo hacia atrás, recostándome otra vez sobre la cama y dejando que él haga lo que desee conmigo.

- Y lo estas haciendo muy bien...

Sonrio y me recuesto sobre su cuerpo, para morder cada parte de su ser, su pecho sus pezones su vientre, subo y lamo la extencion de su cuerpo para perderme en su cuello y susurrarle

-Quieres que te posea de nuevo? quieres ser mio otra vez?... muero de ganas de penetrarte...

Me restriego contra su sexo... haciendole que abra sus piernas para que me encierre en ellas, esta es la sesion de sexo y pasion mas larga que he tenido... primero con los sentimientos de camus y despues... con lo travieso que salio.. me vuelve loco

Las atenciones que Shura le brinda a mi cuerpo provocan a mis ojos cerrarse, y a mis manos aferrarse con caricias sobre su piel, piel que aún es muy sensible a sus deseos.

Mis dedos divagan sobre su espalda, bajando y subiendo por aquellas líneas marcadas de sus músculos perfectos.

—Si-i... Si quiero....— Mis piernas le dejan espacio y mi boca besa y acaricia la piel que tiene cerca con lamidas suaves y sutiles.

Realmente quiero que disfrute esto, y que desee repetirlo muchas veces más, porque no creo cansarme nunca de estar asi con él.

Estaba gozando como nunca que me di cuenta cuando abrió sus piernas para mi...me coloco entre ellas y comienzo a restregare

Susurro a su oído

-será un honor de nuevo hacerlo cariño

Me coloco en posición estaba muy duro y hasta dolía un poco..pero quería poseerlo ya.

Poco a poco voy entrando, es más fácil que hacia rato no se porque pero lo gozaba...entraba despacio y le sonreía, una vez dentro le observo y le digo

-quieres bailar de nuevo conmigo?

Entre abrí los ojos y le observé acomodarse en medio de mis piernas, sin romper nuestra posición; sabía lo que vendría a continuación y estaba listo para recibirlo, porque lo deseaba. Le hice mayor espacio abriendo mi cadera, y cuando le sentí entrar, mis labios y dientes se apretaron, mientras ahogaba un gemido placentero en mi garganta y mis manos se adherian a las sábanas.

Mi carne le fue reconociendo casi al instante, abriéndole paso para que tocara aquella zona sensible que me arranco un gemido.

Sentí el cosquilleo en mi vientre incrementarse y el deseo en mis dedos por aferrarse con fuerza contra aquella piel tibia y suave que conformaba su espalda.

El que me mirara me tensaba un poco y no mi cara no dudo en demostrárselo, aunque era magistral observar aquella sonrisa y sus labios hinchados de placer, asi como las marcas que mis dientes habían dejado por su piel.

—Amo... bailar contigo...— Dije de forma entrecortada. Mi mano subió hasta su cara y le acarició la mejilla.

Me sentí loco y enardecido por sentirlo con fuerza dentro de mi.

Gemía al oírle...estaba hipnotizado por su culpa pero amaba sentirle así, caliente y listo para mi.

Entre y de nuevo su cuerpos recibio con gusto, espere un momento y comencé a moverme..despacio

-así amor? Baila conmigo

Su virilidad había quedado entre nuestros cuerpos por lo que era más excitante para el

Yo mordía su cuello y besaba sus labios pero era momento de innovar algo por lo que me senté con el encima mío...la penetracion se hizo más profunda al instante

-vamos amor...te toca moverte a ti

Con cada movimiento, el placer escapó de mi boca. Mis labios se mordian y liberaban aquél sonido producto de sus embestidas.

Amaba que me llamara amor mientras me tomaba, y eso liberaba mi deseo oprimido entre nuestros cuerpos. Sentía mi virilidad hinchada en deseo rozándose contra nuestra piel, y sus tésticulos golpear contra mis gluteos cada vez que se movía.

Mis caderas cooperaban con su vaiven, abriéndose y cerrándose cuando él me embestia, y mis manos tocaban y apretaban la piel que podían cazar mientras yo me deshacia entre sus brazos.

Me percaté del cambio de movimiento, y aunque fue un poco doloroso hacerlo sin salir, fue algo delicioso, cuando quedé nuevamente de rodillas sobre el colchón, con la oportunidad de modular que tanto deseaba obtener de él.

Le sonreí de forma traviesa y me encorvé para besarle, jalado sus labios con mis dientes sin sangrar. Apoyé las manos en su vientre y e fui movimiento sobre él; la punta tocaba fondo y eso me hacia gemir con cada movimiento. Mi cabello largo y liso se resbalaba por arriba de mis hombros, y bañaba nuestros cuerpos con su atípico color.

Me hice un poco para atrás, apoyando mis dedos sobre su rodilla y el otro acariciando su pecho al ritmo de nuestro delicioso e implacable vaiven.

Un sonido de escocimiento se liberó de mi boca

—mmm... Eres delicioso....— Realmente me gustaba sentirlo entre mi carne y amaba el acoplamiento perfecto entre nuestros cuerpos.

Hago los movimientos más pausados y profundos...así como le gustan a el.

La verdad pensé que pasaría mis noches de sexo con alguien más y nunca con Camus pero debo decir que me encanta.

-estas...exquisito mi amor...mmmhh

Incremento un poco la velocidad de mís estocadas y embestidas mientras beso si cuello y su pecho...

-bésame

Es la orden que sale con energía, la misma energía con la que masturbo si sexo entre nosotros

Con cada uno de sus movimientos el placer se escapaba de mi boca con gemidos ahogados. Mi habitacíón solía ser completamente solitaria y silenciosa, pero en aquella noche el sonido del placer perforaba todas las habitaciones.

Le hice espacio abriendo y cerrando mis mejillas sin dejar de moverme contra su virilidad, y me incliné sobre su cuerpo para besar sus labios, justo como él me habia ordenado.

—Pide lo que quieras amor... Soy tuyo...— Jadee, penetrandome con su erección una y otra vez, con mucha mas fuerza. —aaahhh!— No sabia que tanto estaba bien para él, pero mordí sus pezones y lami su piel sin reparo.

Incremente el movimiento de su cuerpo y el mio, mientras jugaba con mi cuerpo, le tocaba donde antes ni imaginarlo y ahora puedo hacerlo todo lo que quiera.

De improvisto me recuesto de nuevo y le susurro sonriente.

-Montame...muevete...

Dije mientras lo atrapo de la cintura con ambas manos..

-Quiero verte gozar a tu ritmo amor

Movi la cadera de arriba abajo para estimularlo mas.