Íbamos de camino al aeropuerto con una media hora de anticipación ya que mi papa no le gustaba encontrarse con tráfico y mi tío tenía una gran ansiedad de ya desaparecer y marcharse a Italia, era evidente que deseaba estar lejos de cuando llegara el momento de que Cid ya estuviera casado con su prometido.
Mi vista se mantenía atenta a las calles que cruzábamos en espera de llegar a la calle que nos quiara a la iglesia y asi hacer mi acto , esto debe funcionar
Sentado a lado de mi hermano todo permanecía en silencio, Dita incluso estaba callado y observando atentamente las calles, algo que me extraño por un momento pero mis pensamientos dolorosos me atraparon de nuevo. Aun recuerdo sus labios, sus caricias, la confesión de su amor aun por mi y yo sin darle una respuesta
Siempre viviras infeliz…
Fueron las palabras de mi sobrino cuando me trato de convencer de que no me fuera y le dijera a Cid la verdad
Es injusto que le ocultes la verdad
Si, es injusto pero es un obsequio que le entrego..una segunda oportunidad para el sea feliz, es lo único que me importa
Ya habíamos llegado a la calle cercana a la iglesia e inmediatamanete comienzo a actuar
-P…Papa, m..me siento mareado creo que quiero
-DETENTE CARDINALE!!!
Doy el freno abrupto y volteo a ver a Dita y posteriormente a Alba , a quien le veo extrañado
-¿Qué les pasa a ambos?
No respondí a mi hermano y haciendo casos a mis impulsos inmediatamente me retiro el cinturón y salgo del automóvil corriendo en dirección a la iglesia en la cual , según Dita contraería nupcias. Tal vez estaba incorrecto que hiciera esto, tal vez solo complicaría mas las cosas…tal vez….
No, no es justo para él , debía darle una respuesta antes de irme, debía aclararle que yo aun…
Pronto llego ante la iglesia, me cuelo entre la gente que iba ingresando, viéndome raro porque no iba de etiqueta sin emabrgo solo me importaba alguien, y es apersona yacía parada frente al altar
-CIID!!!
Grite con ímpetu mientras me acercaba corriendo hacia él clavando mi mirada fijamente hacia él mientars mis labios se mostraban temblorosos por la agitación que tenía así como por los nervios en revelarle la verdad. Una vez que estoy frente a él tomo un poco de aire para después susurrar
-C..Cid, perdóname...que te interrumpa pero debo hablar contigo…antes de irme