La Historia (XD): Este fue el primer fic de mi vida XD no se por qué, pero creo que soñé con esta pareja y a la mañana siguiente me llenó de inspiración para escribir. No será el que está mejor redactado, pero le tengo cierto aprecio porque fue el primero. Lo raro es que no es yaoi XD y encima la pareja es rarísima, pero buee... espero que les guste^^
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Primera Parte: Excursion al santuario
Era una tarde calida y despejada en el santuario. Una chica de cabellos rubios salio muy contenta desde su casa. Se sentia muy emocionada de conocer ese lugar maravilloso que era Grecia. Tenia un vestido color rosado y un lazo en su largo cabello, no llevaba su armadura, solo una mascara que siempre le cubria el rostro. Llevaba una camara de fotos para capturar lo maravilloso del paisaje. Ademas se habia vestido muy bien porque sabia quien seria su guia. Ese hombre de cabellos aguamarina, con ojos azules tan frios y profundos como los mares congelados de Siberia.
Ella se dirigio hacia la onceava casa del zodiaco. Un escalofrio la invadio antes de tocar la puerta. Gracias a la ayuda de Hyoga que convencio a su maestro de acompañarla, ella podia pasar el dia con ese caballero que la volvia loca. "Bendito seas Hyoga" dijo en sus pensamientos.
Se dispuso a tocar la puerta de una vez, "no valla a pensar que soy una irresponsable al ver que llego tarde".
Se abre la puerta lentamente. La rubia se quedo impactada al ver la figura de ese hermoso y elegante caballero. Como siempre llevaba su armadura que ese dia tenia un brillo especial. Cuando esos profundos ojos azules la miraron sintio un leve escalofrio, se sonrojo y sorio diciendo:
_¡Hola Camus-San!
El toma su mano y la besa tiernamente. En ese momento ella estaba como un tomate (menos mal que tenia la mascara, sino Camus se hubiera dado cuenta de todo).
_Buenos dias June- sonriendo amablemente - has venido a que te enseñe esta maravillosa ciudad, ¿verdad?
_¡Si! Le pregunte a Hyoga quien era el mejor para pedirle este gran favor y el me dijo que usted- mirandolo fijamente a traves de su mascara.
_Puedes tutearme. Se ve que te has venido preparada- haciendose el que miraba la camara, pero en realidad la estaba mirando a ella-bueno entonces vallamos ya, asi tenemos mas tiempo para recorrer.
_¡Adelante!- dijo June con la voz llena de alegria.
El frances nunca se habia imaginado que no era una niña la que vendria con el, era una hermosa mujer guerrera quien lo impacto a primera vista. Hyoga no le habia dicho nada sobre ella, solo que se llamaba June. El acepto solo por compromiso con su alumno preferido. Pero ahora estaba feliz de poder acompañar a esa simpatica y bonita rubia.
Recorrieron las 12 casas, saludando a los caballeros que ahi se encontaban. Shaka le regalo unas flores de loto y Afrodita rosas blancas, rojas y negras. June estaba tan emocionada que se saco fotos con todos los caballeros. Luego fueron a donde estaba el Coliseo, donde la rubia tambien saco muchas fotos. Al final del dia estaban los dos contemplando desde una colina los colores de un hermoso atardecer.
_June, ¿por que viniste a este lugar?- pregunto el peliaguamarina.
_Ehh... Es que queria conocer el santuario y tambien visitar a mis amigos de bronce- sabiendo que la verdadera razon del viaje era Camus.
_Ahh...Tu eres la novia de Andromeda, ¿No es cierto?- le dijo con voz cortante.
_Eso ya paso... Fue una amor adolescente -sollozando- El se canso de mi.
Camus se sentia muy culpable de haberle hecho recordar malos momentos, pero tenia que sacarse la duda. Se sento a su lado.
_Lo siento, yo no queria hacerte sentir mal, enserio, perdoname- La miro de una forma tan tierna que nadie podria no perdonarlo.
_No, esta bien-derritiendose por el- yo soy una estupida que no puede borrar el pasado y olvidar los sentimientos- dijo secandose las lagrimas.
_A veces es bueno no olvidar los sentimientos y tener personas a nuestro lado a las que amamos y sabemos que nos aman.
Ambos quedaron mirandose en silencio. La rubia estaba perdida en los hermosos ojos de Camus y el frances intentaba adivinar su rostro debajo de esa mascara de metal.
Se quedaron asi duarnte un rato. De repente se oye un fuerte trueno. Comienza a llover muy fuerte. Camus se quita la capa blanca y se la coloca a June para que no se moje. La toma de la mano.
_¡Vamos!, ¡Corre! Debemos llegar a mi templo antes de que comienzen los truenos.
Iban corriendo bajo la lluvia. June estaba tan contenta de que Camus la tomara de la mano que no le importaba si el cielo se caia abajo.
Llegaron a la casa.
Segunda Parte: La casa de Acuario
_Puedes sentarte- dijo el frances amablemente.
_Gracias.
El peliaguamarina comienza a sacarse su armadura. La rubia lo miraba discimuladamente bajo su mascara. Estaba todo mojado, desde su pelo hasta sus zapatos. No se imagina lo sexy que se veia Camus en ese momento. El agua le daba un brillo perlado a su piel. Su ropa se transparentaba dejando ver su esbelto y trabajado cuerpo. Su cabello estaba salvajemente despeinado.
La chica de ojos esmeralda estaba en el cielo al ver esa imagen, ver al caballero de acuario asi la excitaba.
El frances se habia dado cuenta de como lo miraba esa chica, tenia un presentimiento de que habia una razon por la cual ella lo eligio entre los demas para que sea su guia. Aunque el intento protegerla de la lluvia, igual se habia mojado su vestido. Esto dejaba ver el sensual cuerpo de la rubia de cabellos largos, ya que la ropa humedecida marcaba sus curvas, haciendola ver irresistible ante sus ojos. El peliaguamarina intentaba sacar los pensamientos perversos de su mente. Se dispuso a ir a su habitacion.
_Si quieres pasar al baño se encuenta al final del pasillo. Voy a traerte algo de ropa, te vas a enfermar sino- dijo mirandola de una forma muy provocativa.
_Muchas gracias Camus, no debes preocuparte tanto- dijo sonrojada, mirando para abajo.
Camus se dirigio hasta su habitacion. Luego June fue hasta el baño. Se veia la luz de una de las habitacionesen el pasillo. La rubia inconscientemente miro hacia ea habitacion. Se encontro con una imagen que la dejo boquiabierta. Era Camus que se encontraba de espaldas con el pecho al descubierto y un diminuto boxer. June quedo paralizada al verlo de esa forma. El aguador volteo y se sorprendio de ver a June ahi.
_Oh, disculpa Camus, no fue mi intencion, perdon, perdon- dijo la rubia sonrojadisima alejandose rapidamente de ahi.
El caballero de acuario se quedo sin habla. Se habia sonrojado tambien. La inocencia de esa chica era irresistible. Se puso una tunica y se dirigio hacia la sala.
_Llueve demasiado, no puedes irte asi, estas muy lejos y es peligroso. Ven, te quedaras en la habitacion de huespedes.
_No es necesario, no te molestes. Yo puedo llegar hasta mi casa- dijo mirando hacia el suelo, despues de lo que paso no podia mirarlo a los ojos.
_No, ya no te dejare ir. No quiero que te pase nada malo, June- dijo con una ternura incomparable.
El chico de oro la tomo de la mano y le indico hacia donde estaba la habitacion. Fue hasta la suya y volvio rapidamente.
_No pude conseguir ropa de mujer, solo tenia esta tunica.
_Esta bien, muchas gracias- dijo la rubia con un tono alegre.
Camus salio de la habitacion cerrando la puerta. Le habia dejado una prenda muy ajustada y semitransparente. "¿Como pretende que yo me ponga esto?", penso. Unos minutos mas tarde se escucha la voz de Camus:
_¿Puedo pasar?
June se sienta en la cama cruzando las piernas y dice:
_Si, pasa.
_Te traje algo de comer.
El frances la mira y no lo puede creer. Ya habia planeado todo. En la noche vendria hacia esta habitacion para poder contemplar su belleza.
_No te hubieras molestado, Camus.
June se sentia extraña y avergonzada de estar con esa tunica tan diminuta frente al hombre que le quitaba el sueño. Ademas las miradas del caballero no le ayudaban demasiado.
_¿Por que eres tan amable conmigo?- dijo la chica rompiendo el silencio.
_La verdad es que me caes muy bien y no voy a dejar a una chica tan hermosa descuidada- sorprendido por el atrevimiento de sus palabras.
_Bueno, voy a dejarte tranquila. Que descanses bien- Con una sonrisa algo perversa.
_Tu tambien, descansa.
June se sentia tan feliz de estar en la casa de su amado pero a la vez triste de no haber podido decirle lo que sentia. Poco a poco se fue durmiendo.
Camus estaba despierto, no podia dormir pensando en ella. Se levanto y mira hacia la ventana. La lluvia no cesaba. Decidioir hacia la habitacion en donde se encontraba la hermosa rubia.
Su iamgen era sublime. Los rayos de luna iluminaban sus curvas que estaban cubiertas por una delgada tunica que dejaba apreciar aun mas su belleza. Se habia dormido con la mascara puesta. El aguador se acerco lentamente hacia la cama. Se sento a su lado y comenzo a acariciar sus cabellos dorados. Su mano descendio hasta su cuello al cual acerco sus labios y beso con absoluta suavidad. Se alejo unos centimetros y June desperto.
Tercera Parte: El Comienzo De Un Gran Amor
_C... Camus... Que...?- dijo levantandose.
_Te deseo June. Desde el primer momento en que te vi. Quiero que seas mia aunque sea solo esta noche.
La rubia no podia creer sus palabras. Era el sueño de su vida, ese caballero tan hermoso estaba a centimetros de ella, tocandola, deseandola. Se diuspuso a hablar pero camus comenzo a quitarle la mascara, ella no puso resistencia.
Su rostro era el de un angel. Ojos color esmeralda, labios de cereza y la piel extremadamente fina y blanca. Era tal y como Camus la imaginaba. Se acerco hacia ella y la beso muy suave y tiernamente para luego terminar con un beso apasionado, explorando su boca con su lengua, bebiendo con deseo esos labios tan delicados. Se coloco encima de ella mientras continuaba besandola. Ella pasaba sus manos por su espalda timidamente. Tenia tanta emocion que dejo caer unas lagrimas. Poco a poco fue animandose y empezo a tocarle su pecho, sintiendo su corazon latir fuerte. June se estremecia al sentir sus frias pero delicadas manos en su cuerpo, pero a la vez sentia miedo y eso se notaba en sus ojos.
_June, ¿Estas bien?, ¿Tu quieres esto? No pasara nada que tu no quieras.
_Quiero todo todo contigo, Camus. Este miedo que siento es normal. Si no es hoy no sera nunca. Yo... yo te amo Camus.
El aguador se sintio sorprendido por su declaracion. Se sentia feliz.
_Enseñame a amarte June- dijo con una sonrisa.
El frances siguio recorriendo su cuerpo con sus labios. A la rubia se le erizaba la piel con cada beso, cada caricia. Le quito la camisa y acaricio su trabajado torso. El siguio desabrochando poco a poco con sus dientes esa delgada tunica que cubria el cuerpo vieginal de la guerrera. Esto la excitaba y la hacia gemir cada vez mas alto. El caballero dorado recorria su cuerpo con su lengua, dejando marcas de besos en su blanca piel. Sus gemidos se intensificaban. El frances termino arrancandole su sensual prenda y se quedo un rato contemplando la desnudez de esa chica que se estaba conviertiendo en su pequeña amante.
Ella comenzo a quitarle el pantalon suavemente. Bajo su manos hasta su entrepierna y toco su miembro inchado. Camus gimio con deseo. Ella intento quitarle el boxer, pero el caballero la detuvo.
_¿Estas segura que quieres entregarte a mi?- pregunto con una sensualidad que derritio aun mas a June.
_Confio plenamente en ti. Te amo.
Se miraron fijamente.
_Yo tambien te amo mi hermosa guerrera.
El maestro de los hielos abrio las piernas de su amazona ardiente con absoluta suavidad y se unio a ella en un apasionado e interminable beso. Ella no podia controlar su deseo hacia ese irresistible caballero. El joven dorado pasaba su tibia lengua por todo el torso de June, mientras ella comenzaba a gemir cada vez mas fuerte. Bajo hasta su entrepierna para lamer con lujuria sus partes mas intimas. La chica estaba extasiada, nonca habia sentido algo asi. Se mordia los labios para no gritar mas alto. Esto a Camus lo excitaba aun mas. Ya no podia aguantar las ganas de poseerla, pero queria que su primera vez sea algo inolvidable.
La amazona ya no pudo contener sus impulsos y gimio de una forma descarada. Habia experimentado su primer orgasmo. Se sentia en el cielo estando con su hermoso y sensual caballero, no podia creer lo que estaba ocurriendo.
El joven aguador se habia enamorado de esa niña inocente, la que se estaba convirtiwndo en su ardiente amante.
June no aguanto mas y le quito esa prenda que tanto molestaba. Ya no sentia miedode lo que pudiera ocurrir. Confiaba plenamente en Camus.
El comenzo a penetrarla muy despacio, controlandose de no lastimarla. Era muy dificil, pero no podia dejar que su amada sufriera. Ella arqueo su espalda y dejo escapar un gemido de placer y un poco de dolor. El frances se movia suavemente el el cuerpo de la amzona. Poco a poco el dolor fue desapareciendo para convertirse en puro placer.
_Oh... Camus... No te detengas... Ahh...
June no podia reprimir sus gritos, se mordia el labio inferior y los movimientos se hacian cada vez mas intensos. Camus la miraba con lujuria. Sabia que ella lo estaba disfrutando y eso lo enloquecia de deseo.
La rubia se aferraba al cuerpo calientede su guerrero. No pudo contener mas sus gemidos y empezo a gritar descaradamente. El aguador se excitaba cada vez mas escuchando los gritos de su amazona ardiente. La penetraba mas intensamente. Trataba de grabarse cada sonido que salia que salia de la boca de su pequeña amante para no olvidar jamas esa noche, la primera noche de pasion.
_Camus... Camus... Camus...
Pronuncio su nombre tantas veces que seria imposible contarlas. Sus cuerpos se movian como si feran uno solo, bañados en un sudor que les daba un brillo perlado a su piel. La luna fue la unica testigo de esa noche de amor y deseo, que seria inolvidable para ambos. Aprendieron a juntos a amarse, sentian que jamas se separarian, que esa noche nunca se terminaria.
Pero el momento llego, con un profundo orgasmo por parte de ambos, termino la locura de amor y pasion salvaje.
Los dos quedaron exhaustos recostados frente a frente en la cama, mirandose fijamente sin pronunciar palabra. El frances acariciaba la suave piel de su guerrera. Ella jugueteaba con los cabellos de su amado. Su respiracion se iba normalizando poco a poco.
_Jamas olvidare esta noche amor mio- dijo el rompiendo el silencio.
_Fue la noche mas maravillosa de toda mi vida. Gracias por cuidarme y protegerme.
_No tienes nada de que agradecerme. Solo prometeme que nunca te iras de mi lado.
_No podria vivir sin ti. Te amo Camus.
Se unieron en un tierno y apasionado beso. Ese Dia los marco para siempre. Siguieron su vida juntos, luchando por Athena y por la paz del mundo, sin olvidar el amor incondicional que se tenian. No importa las adversidades que puedan venir en el futuro, ellos las enfrentaran juntos y podran vencer gracias a la fuerza del amor.
FIN
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Primera Parte: Excursion al santuario
Era una tarde calida y despejada en el santuario. Una chica de cabellos rubios salio muy contenta desde su casa. Se sentia muy emocionada de conocer ese lugar maravilloso que era Grecia. Tenia un vestido color rosado y un lazo en su largo cabello, no llevaba su armadura, solo una mascara que siempre le cubria el rostro. Llevaba una camara de fotos para capturar lo maravilloso del paisaje. Ademas se habia vestido muy bien porque sabia quien seria su guia. Ese hombre de cabellos aguamarina, con ojos azules tan frios y profundos como los mares congelados de Siberia.
Ella se dirigio hacia la onceava casa del zodiaco. Un escalofrio la invadio antes de tocar la puerta. Gracias a la ayuda de Hyoga que convencio a su maestro de acompañarla, ella podia pasar el dia con ese caballero que la volvia loca. "Bendito seas Hyoga" dijo en sus pensamientos.
Se dispuso a tocar la puerta de una vez, "no valla a pensar que soy una irresponsable al ver que llego tarde".
Se abre la puerta lentamente. La rubia se quedo impactada al ver la figura de ese hermoso y elegante caballero. Como siempre llevaba su armadura que ese dia tenia un brillo especial. Cuando esos profundos ojos azules la miraron sintio un leve escalofrio, se sonrojo y sorio diciendo:
_¡Hola Camus-San!
El toma su mano y la besa tiernamente. En ese momento ella estaba como un tomate (menos mal que tenia la mascara, sino Camus se hubiera dado cuenta de todo).
_Buenos dias June- sonriendo amablemente - has venido a que te enseñe esta maravillosa ciudad, ¿verdad?
_¡Si! Le pregunte a Hyoga quien era el mejor para pedirle este gran favor y el me dijo que usted- mirandolo fijamente a traves de su mascara.
_Puedes tutearme. Se ve que te has venido preparada- haciendose el que miraba la camara, pero en realidad la estaba mirando a ella-bueno entonces vallamos ya, asi tenemos mas tiempo para recorrer.
_¡Adelante!- dijo June con la voz llena de alegria.
El frances nunca se habia imaginado que no era una niña la que vendria con el, era una hermosa mujer guerrera quien lo impacto a primera vista. Hyoga no le habia dicho nada sobre ella, solo que se llamaba June. El acepto solo por compromiso con su alumno preferido. Pero ahora estaba feliz de poder acompañar a esa simpatica y bonita rubia.
Recorrieron las 12 casas, saludando a los caballeros que ahi se encontaban. Shaka le regalo unas flores de loto y Afrodita rosas blancas, rojas y negras. June estaba tan emocionada que se saco fotos con todos los caballeros. Luego fueron a donde estaba el Coliseo, donde la rubia tambien saco muchas fotos. Al final del dia estaban los dos contemplando desde una colina los colores de un hermoso atardecer.
_June, ¿por que viniste a este lugar?- pregunto el peliaguamarina.
_Ehh... Es que queria conocer el santuario y tambien visitar a mis amigos de bronce- sabiendo que la verdadera razon del viaje era Camus.
_Ahh...Tu eres la novia de Andromeda, ¿No es cierto?- le dijo con voz cortante.
_Eso ya paso... Fue una amor adolescente -sollozando- El se canso de mi.
Camus se sentia muy culpable de haberle hecho recordar malos momentos, pero tenia que sacarse la duda. Se sento a su lado.
_Lo siento, yo no queria hacerte sentir mal, enserio, perdoname- La miro de una forma tan tierna que nadie podria no perdonarlo.
_No, esta bien-derritiendose por el- yo soy una estupida que no puede borrar el pasado y olvidar los sentimientos- dijo secandose las lagrimas.
_A veces es bueno no olvidar los sentimientos y tener personas a nuestro lado a las que amamos y sabemos que nos aman.
Ambos quedaron mirandose en silencio. La rubia estaba perdida en los hermosos ojos de Camus y el frances intentaba adivinar su rostro debajo de esa mascara de metal.
Se quedaron asi duarnte un rato. De repente se oye un fuerte trueno. Comienza a llover muy fuerte. Camus se quita la capa blanca y se la coloca a June para que no se moje. La toma de la mano.
_¡Vamos!, ¡Corre! Debemos llegar a mi templo antes de que comienzen los truenos.
Iban corriendo bajo la lluvia. June estaba tan contenta de que Camus la tomara de la mano que no le importaba si el cielo se caia abajo.
Llegaron a la casa.
Segunda Parte: La casa de Acuario
_Puedes sentarte- dijo el frances amablemente.
_Gracias.
El peliaguamarina comienza a sacarse su armadura. La rubia lo miraba discimuladamente bajo su mascara. Estaba todo mojado, desde su pelo hasta sus zapatos. No se imagina lo sexy que se veia Camus en ese momento. El agua le daba un brillo perlado a su piel. Su ropa se transparentaba dejando ver su esbelto y trabajado cuerpo. Su cabello estaba salvajemente despeinado.
La chica de ojos esmeralda estaba en el cielo al ver esa imagen, ver al caballero de acuario asi la excitaba.
El frances se habia dado cuenta de como lo miraba esa chica, tenia un presentimiento de que habia una razon por la cual ella lo eligio entre los demas para que sea su guia. Aunque el intento protegerla de la lluvia, igual se habia mojado su vestido. Esto dejaba ver el sensual cuerpo de la rubia de cabellos largos, ya que la ropa humedecida marcaba sus curvas, haciendola ver irresistible ante sus ojos. El peliaguamarina intentaba sacar los pensamientos perversos de su mente. Se dispuso a ir a su habitacion.
_Si quieres pasar al baño se encuenta al final del pasillo. Voy a traerte algo de ropa, te vas a enfermar sino- dijo mirandola de una forma muy provocativa.
_Muchas gracias Camus, no debes preocuparte tanto- dijo sonrojada, mirando para abajo.
Camus se dirigio hasta su habitacion. Luego June fue hasta el baño. Se veia la luz de una de las habitacionesen el pasillo. La rubia inconscientemente miro hacia ea habitacion. Se encontro con una imagen que la dejo boquiabierta. Era Camus que se encontraba de espaldas con el pecho al descubierto y un diminuto boxer. June quedo paralizada al verlo de esa forma. El aguador volteo y se sorprendio de ver a June ahi.
_Oh, disculpa Camus, no fue mi intencion, perdon, perdon- dijo la rubia sonrojadisima alejandose rapidamente de ahi.
El caballero de acuario se quedo sin habla. Se habia sonrojado tambien. La inocencia de esa chica era irresistible. Se puso una tunica y se dirigio hacia la sala.
_Llueve demasiado, no puedes irte asi, estas muy lejos y es peligroso. Ven, te quedaras en la habitacion de huespedes.
_No es necesario, no te molestes. Yo puedo llegar hasta mi casa- dijo mirando hacia el suelo, despues de lo que paso no podia mirarlo a los ojos.
_No, ya no te dejare ir. No quiero que te pase nada malo, June- dijo con una ternura incomparable.
El chico de oro la tomo de la mano y le indico hacia donde estaba la habitacion. Fue hasta la suya y volvio rapidamente.
_No pude conseguir ropa de mujer, solo tenia esta tunica.
_Esta bien, muchas gracias- dijo la rubia con un tono alegre.
Camus salio de la habitacion cerrando la puerta. Le habia dejado una prenda muy ajustada y semitransparente. "¿Como pretende que yo me ponga esto?", penso. Unos minutos mas tarde se escucha la voz de Camus:
_¿Puedo pasar?
June se sienta en la cama cruzando las piernas y dice:
_Si, pasa.
_Te traje algo de comer.
El frances la mira y no lo puede creer. Ya habia planeado todo. En la noche vendria hacia esta habitacion para poder contemplar su belleza.
_No te hubieras molestado, Camus.
June se sentia extraña y avergonzada de estar con esa tunica tan diminuta frente al hombre que le quitaba el sueño. Ademas las miradas del caballero no le ayudaban demasiado.
_¿Por que eres tan amable conmigo?- dijo la chica rompiendo el silencio.
_La verdad es que me caes muy bien y no voy a dejar a una chica tan hermosa descuidada- sorprendido por el atrevimiento de sus palabras.
_Bueno, voy a dejarte tranquila. Que descanses bien- Con una sonrisa algo perversa.
_Tu tambien, descansa.
June se sentia tan feliz de estar en la casa de su amado pero a la vez triste de no haber podido decirle lo que sentia. Poco a poco se fue durmiendo.
Camus estaba despierto, no podia dormir pensando en ella. Se levanto y mira hacia la ventana. La lluvia no cesaba. Decidioir hacia la habitacion en donde se encontraba la hermosa rubia.
Su iamgen era sublime. Los rayos de luna iluminaban sus curvas que estaban cubiertas por una delgada tunica que dejaba apreciar aun mas su belleza. Se habia dormido con la mascara puesta. El aguador se acerco lentamente hacia la cama. Se sento a su lado y comenzo a acariciar sus cabellos dorados. Su mano descendio hasta su cuello al cual acerco sus labios y beso con absoluta suavidad. Se alejo unos centimetros y June desperto.
Tercera Parte: El Comienzo De Un Gran Amor
_C... Camus... Que...?- dijo levantandose.
_Te deseo June. Desde el primer momento en que te vi. Quiero que seas mia aunque sea solo esta noche.
La rubia no podia creer sus palabras. Era el sueño de su vida, ese caballero tan hermoso estaba a centimetros de ella, tocandola, deseandola. Se diuspuso a hablar pero camus comenzo a quitarle la mascara, ella no puso resistencia.
Su rostro era el de un angel. Ojos color esmeralda, labios de cereza y la piel extremadamente fina y blanca. Era tal y como Camus la imaginaba. Se acerco hacia ella y la beso muy suave y tiernamente para luego terminar con un beso apasionado, explorando su boca con su lengua, bebiendo con deseo esos labios tan delicados. Se coloco encima de ella mientras continuaba besandola. Ella pasaba sus manos por su espalda timidamente. Tenia tanta emocion que dejo caer unas lagrimas. Poco a poco fue animandose y empezo a tocarle su pecho, sintiendo su corazon latir fuerte. June se estremecia al sentir sus frias pero delicadas manos en su cuerpo, pero a la vez sentia miedo y eso se notaba en sus ojos.
_June, ¿Estas bien?, ¿Tu quieres esto? No pasara nada que tu no quieras.
_Quiero todo todo contigo, Camus. Este miedo que siento es normal. Si no es hoy no sera nunca. Yo... yo te amo Camus.
El aguador se sintio sorprendido por su declaracion. Se sentia feliz.
_Enseñame a amarte June- dijo con una sonrisa.
El frances siguio recorriendo su cuerpo con sus labios. A la rubia se le erizaba la piel con cada beso, cada caricia. Le quito la camisa y acaricio su trabajado torso. El siguio desabrochando poco a poco con sus dientes esa delgada tunica que cubria el cuerpo vieginal de la guerrera. Esto la excitaba y la hacia gemir cada vez mas alto. El caballero dorado recorria su cuerpo con su lengua, dejando marcas de besos en su blanca piel. Sus gemidos se intensificaban. El frances termino arrancandole su sensual prenda y se quedo un rato contemplando la desnudez de esa chica que se estaba conviertiendo en su pequeña amante.
Ella comenzo a quitarle el pantalon suavemente. Bajo su manos hasta su entrepierna y toco su miembro inchado. Camus gimio con deseo. Ella intento quitarle el boxer, pero el caballero la detuvo.
_¿Estas segura que quieres entregarte a mi?- pregunto con una sensualidad que derritio aun mas a June.
_Confio plenamente en ti. Te amo.
Se miraron fijamente.
_Yo tambien te amo mi hermosa guerrera.
El maestro de los hielos abrio las piernas de su amazona ardiente con absoluta suavidad y se unio a ella en un apasionado e interminable beso. Ella no podia controlar su deseo hacia ese irresistible caballero. El joven dorado pasaba su tibia lengua por todo el torso de June, mientras ella comenzaba a gemir cada vez mas fuerte. Bajo hasta su entrepierna para lamer con lujuria sus partes mas intimas. La chica estaba extasiada, nonca habia sentido algo asi. Se mordia los labios para no gritar mas alto. Esto a Camus lo excitaba aun mas. Ya no podia aguantar las ganas de poseerla, pero queria que su primera vez sea algo inolvidable.
La amazona ya no pudo contener sus impulsos y gimio de una forma descarada. Habia experimentado su primer orgasmo. Se sentia en el cielo estando con su hermoso y sensual caballero, no podia creer lo que estaba ocurriendo.
El joven aguador se habia enamorado de esa niña inocente, la que se estaba convirtiwndo en su ardiente amante.
June no aguanto mas y le quito esa prenda que tanto molestaba. Ya no sentia miedode lo que pudiera ocurrir. Confiaba plenamente en Camus.
El comenzo a penetrarla muy despacio, controlandose de no lastimarla. Era muy dificil, pero no podia dejar que su amada sufriera. Ella arqueo su espalda y dejo escapar un gemido de placer y un poco de dolor. El frances se movia suavemente el el cuerpo de la amzona. Poco a poco el dolor fue desapareciendo para convertirse en puro placer.
_Oh... Camus... No te detengas... Ahh...
June no podia reprimir sus gritos, se mordia el labio inferior y los movimientos se hacian cada vez mas intensos. Camus la miraba con lujuria. Sabia que ella lo estaba disfrutando y eso lo enloquecia de deseo.
La rubia se aferraba al cuerpo calientede su guerrero. No pudo contener mas sus gemidos y empezo a gritar descaradamente. El aguador se excitaba cada vez mas escuchando los gritos de su amazona ardiente. La penetraba mas intensamente. Trataba de grabarse cada sonido que salia que salia de la boca de su pequeña amante para no olvidar jamas esa noche, la primera noche de pasion.
_Camus... Camus... Camus...
Pronuncio su nombre tantas veces que seria imposible contarlas. Sus cuerpos se movian como si feran uno solo, bañados en un sudor que les daba un brillo perlado a su piel. La luna fue la unica testigo de esa noche de amor y deseo, que seria inolvidable para ambos. Aprendieron a juntos a amarse, sentian que jamas se separarian, que esa noche nunca se terminaria.
Pero el momento llego, con un profundo orgasmo por parte de ambos, termino la locura de amor y pasion salvaje.
Los dos quedaron exhaustos recostados frente a frente en la cama, mirandose fijamente sin pronunciar palabra. El frances acariciaba la suave piel de su guerrera. Ella jugueteaba con los cabellos de su amado. Su respiracion se iba normalizando poco a poco.
_Jamas olvidare esta noche amor mio- dijo el rompiendo el silencio.
_Fue la noche mas maravillosa de toda mi vida. Gracias por cuidarme y protegerme.
_No tienes nada de que agradecerme. Solo prometeme que nunca te iras de mi lado.
_No podria vivir sin ti. Te amo Camus.
Se unieron en un tierno y apasionado beso. Ese Dia los marco para siempre. Siguieron su vida juntos, luchando por Athena y por la paz del mundo, sin olvidar el amor incondicional que se tenian. No importa las adversidades que puedan venir en el futuro, ellos las enfrentaran juntos y podran vencer gracias a la fuerza del amor.
FIN