Campo de entrenamiento

El campo estaba vacio no habia mucha necesidad de esconderse y daba un paso certero al casatillo, habia uniformes asi que el plan podria ser ponercelos y pasar por soldados de Dragon, pero los soldados estaban ayudando al pueblo o escuchando a su rey, seria mejor cruzar rapidamente y dirigirnos al castillo y ver por donde entrar

-vamos mi amor no perdamos tiempo, no quiero que corras ningun peligro-

Llegue aquí junto a Jabu, quien me guió hasta este lugar, estaba desierto ciertamente no había nadie, en el lugar, pero esa no era razón para confiarse -Vamos!.. Por aquí tenemos paso al Jardín Central, o infiltrarnos por la parte trasera del castillo.. Ideas?- pregunte, para saber a que lugar nos dirigíamos, no me encontraba nada cómodo, visitando este Reino, ademas ellos no querían pelea y que su pueblo sufriera, por ello mis intenciones no eran causarle problemas, pero son ordenes del Rey Shura -A que lado nos dirigimos Jabu?- volví a preguntar al tiempo que soltaba un pesado suspiro.

-si me lo preguntas a mi amor es mejor que vayamos por detras es mas solitario y el jardin puede ser un lugar mas visitado por el rey para pensar o planear cosas, iremos sigilosamente como buen espia que soy y nos llevaremos estos uniformes por si acaso, ademas donde vayamos si estamos los dos tendremos una buena mision o un cruel fin pero juntos-

Le sonrei y mirandolo asus ojos lo bese profundamente

-por si fuese el ultimo amor-

Le escuche y correspondí aquel dulce beso que me entregaban sus labios, no contaba con que fuera el ultimo. Nunca me permitiría dejar morir a Jabu, o descuidarme de las cosas que en verdad quiero. Nos las volveré a perder. No ya no mas, las cuidare a costa de mi vida. Entrelace su mano con la mía, para no dejarle paso a alejarse -No sera el ultimo...- susurre contra su oído, y luego bese su mejilla. Vi a mis alrededores y comprobé que no había nadie, mas que uniformes tirados de los guardias del palacio, suspire esta vez ya había perdido conocimiento del lugar y me estaba costando un poco ubicarme correctamente, me sentía un poco mareado, aunque nada muy preocupante -Guíame Jabu, Al parecer mi conocimiento de este lugar no me esta ayudando- sonrei de medio lado -Tu conoces mejor, así que me podrías guiar?- pregunte un poco avergonzando.

Le tome de su mano y sonriendo le tranquilice

-yo te guiare no es que conosca muy bien este castillo, no pase mas alla del recibidor la ultima vez, pero esros castillos no dejan de ser siempre iguales vamos amor-

Lo note medio extraño, Milo estaba como desorientado, podria ser el cansansio, asi que apure el paso para luego descansar en un lugar seguro

-sabes se que no sera nuestro ultimo beso, pero queiro que cada uno sea tan increible como si el siguiente no existiera-

-Al parecer yo he perdido un poco el conocimiento del lugar- conteste sonriente. Note como sus pasos eran mas rápidos e intente seguirle el ritmo, pero me estaba costando un poquito, lo trate de disimular, algo que me resulto bien, pero el mareo aun no se me quitaba -Yo también quiero que cada beso sea tan fugaz, como si ello fuera la ultimo- sonrei de nueva cuenta y seguí sus pasos por el lugar, alivianando mis respiraciones como me era posible.

El campo pese a estar vacio , y a ser solo un campo de entrenamiento olia a muerte.Era obvio que estos entrenamientos eran hasta la muerte y que asi se decidia quienes eran los mas aptos para las guerras, cosas a mi parecer totalmente incensatas por que no todos podian vivir en paz con lo suyo y no querer lo del otro.

No me habia dado cuenta de lo rapido que iba cuando a pesar que ibamos de la mano Milo se iba quedabdo atras y me ponia resistencia al caminar

me acerque y le vi extraño


-que pasa amor, te noto extraño, se nota que tienes algo por tu cara y tus ojos prefieres descansar-

Le vi acercarse y supe que había sido descubierto "No tuve suerte esta vez" pensé. Levante la vista lo mas estable que se me era posible, para observar sus hermosas orbes. -.. Eh?.. No, no tengo nada- me apresure un poco al contestar, aunque sentí que la misma temperatura de mis manos bajaba, no me explica el por que?.. Tan repentino que me vino aquello y molesto a la vez, sentirse mareado no era de mi agrado, agregando que la temperatura de mis manos era bastante helada. -No te preocupes... Vamos tenemos que regresar a Kraken- hable de forma seria. Una de mis mayores preocupaciones ahora, era el estado del pueblo, y si no terminaba esto rápido entonces me desesperaría mas de lo que ya estoy. -Vamos...- le sonrei -Guíame si?.. Ademas mientras mas pronto terminemos mas pronto nos iremos...- explaye una nueva sonrisa cerrando mis ojos. Recupere mi postura, para poder comenzar.

-mi amor se cuanto te preocupa tu pueblo, que ahora es el mio tambien, pero no puedo dejar que algo te pase por obedecer ciegamente a Shura, si luego hay que responderle y recibir un castigo si no logramos lo que desea, yo lo recibire por los dos pero por ahora ven conmigo-

tome la mano de Milo y lo lleve a un pequeño sitio de descanso en ese campo debia simular un sitio de proteccion

-ven amor descansa no se que te ha pasado pero estas frios tus manos lo estan y al tenerlas entre las mias note la baja de temperatura, eso puede significar fiebre, no se si estas en condiciones de seguir-

Le escuche, maldecía con todas mis esfuerzas están en un estado tan deplorable como el que ahora se me presentaba. No me podía tardar mas, pero Jabu de cierta forma tenia razón, esta ignorando mi propio estado, dado mas interés por otras cosas. No me gustaba la idea de recibir un castigo o que el recibiera por ambos, me desagradaba la idea, por eso no me importaba en que estado yo estuviera. -Olvida esa idea, nunca permitiría que te hirieran Jabu...- le sonrei cerrando mis ojos.

Me siento en el bajo el árbol como me lo a indicado, pero aun así no me quedare aquí -N-no te preocupes... Ademas estamos en el reino de Dragón, no puedo quedarme quieto en este lugar- comente con tono serio -Jabu se que te preocupas por mi estado, pero esta fiebre no me ganara...- le sonrei y tome su mano entre la mía para entrelazarla. El calor que la misma me brindaba, me hacia sentir en demasía bien -Terminemos esto y regresemos juntos a Kraken..- le susurre al oído, para luego una vez mas poseer sus dulces labios.

-Nunca olvides que ... Te Amo mas que a mi vida...- hable para luego volver a colocarme de pie, junto a el -Tienes razón puede que tenga fiebre, pero debe ser por el ambiente...- comente, creo que al estar en este lugar que se encontraba a mas altura me mareaba un poco, pero el que mis manos enfriaran no era algo que ahora me preocupase -Continuemos por favor amor...- le llame para luego con un jalón atraer su cuerpo al mía y capturar sus labios en un fugaz beso -Si?...- finalice con una sonrisa, manteniendo aun el entrelace.

Milo me daba muchas razones por que seguir y yo aunque le entendia, no podia olvidarme que haria yo si esa fiebre que tenia no era solo por el lugar sino por otra cosas.

Pero luego de sus palabras mas intimas de su beso profundo el que me llevo a soñar estar asi con {él toda la vida no pude negarle lo que me pedia, en realidad nunca podria negarle nada a mi Milo, lo ayude a caminar mas rapido

- esta bien mi amor vamos derecho se ve que este campo termina por ese lado y por ahi debe haber una barraca o algo que se introdusca al castillo-

Jabu tomo fuerzas pese a su preocupacion y siguio adelante

-milo si en cualquier momento veo que te pones peor no me importara ni Shura ni Saga ni ningun reino por salvarte-

-Mejor dejemoslo..- susurre con mas alegría. Me lo había pensado y no me servia de nada seguir con esto, para mi por lo menos era una perdida de tiempo. Prefería estar de viaje o visitando lugares, al menos esas siempre fueron mis preferencias -Encuentro esto algo inútil, por lo menos en esta ocasión..- le susurre y sin importarme si me sentía mareado o algo, le tome la muñeca -Conozco un lugar en las llanuras que ansió mostrarte Jabu...- le dije mientras corría con mi mayor fuerza, el camino me seria largo, pero estando con el, eso no me importaba.

-Mejor dejemos esto, para mostrarte lo que quiero..- hable con felicidad y continué corriendo por el lugar, por lo menos hasta llegar a las llanuras de G`kar.

Le sonrei ante sus palabras no podia estar mas que alegre me llevaria a un lugar especial solo para los dos y olvidariamos esta tonta mision

Senti la fuerza de su agarre, la velocidad que imprimia al viaje y yo le seguia como el hombre mas enamorado

-no te esfuerces demasiado amor recuerda que estas aun un poco debil-

y asi abandonamos ese campo de soldados heridos a un lugar que esperaba seria maravilloso

Despues de preguntar a algunas personas si habían visto pasar a Dohko y de buscarlo un rato llega a los campos de entrenamiento. - Vaya, nunca había venido por aqui - sonríe saludando con la mano y acercándose a donde estaba entrenando, algunos postes para golpes se veían destrozados

- te he estado buscando, así que estabas aquí - le sonrió cogiendo de encima de un poste una especie de espada de madera que se utilizaba para entrenar