Aqui es donde se encuentra Hilda de Polaris en este momento.
La joven sacerdotisa acaba de regresar del lugar de oracion donde se encuentra la enorme y portentosa estatua del padre de los dioses nordicos. Tras haber cumplido con el ritual protocolario que se exige de ella diariamente para asegurar que los hielos no se fundan la joven se despidio de sus subditos y volvio a palacio.
Fuera de aquella estancia habia varios centinelas velando los pasillos y cada recoveco del palacio. Ninguno de los dioses guerreros se encontraba ahora en el recinto y la joven supuso que todos andarian de patrulla por las zonas que le correspondia proteger debido a su rango como jarls de Asgard.
Se sento en una comoda butaca, aliso su vestido y dejo que su cabeza reposara sobre el respaldo de aquel comodo y mullido asiento. Cerro sus ojos y coloco sus pies sobre una banquetita para estar mas comoda y poco a poco se fue relajando, aunque no llego a dormirse. La joven se encontraba algo cansada y necesitaba unos momentos de tranquilidad.
Entretanto una de las doncellas de palacio se aseguro de que la chimenea continuaba encendida, corrio las gruesas cortinas de terciopelo para que no entrara corriente y tambien cerro las puertecillas que se usaban para bloquear las ventanas. Estas servian tanto de medida para combatir el atroz frio reinante en aquellas tierras y como medida antirrobo pues quien quiera que asaltara el palacio debia hacer unos destrozos terribles para poder entrar.
____________________________
Cualquier personaje es libre de pasarse por aqui.
La joven sacerdotisa acaba de regresar del lugar de oracion donde se encuentra la enorme y portentosa estatua del padre de los dioses nordicos. Tras haber cumplido con el ritual protocolario que se exige de ella diariamente para asegurar que los hielos no se fundan la joven se despidio de sus subditos y volvio a palacio.
Fuera de aquella estancia habia varios centinelas velando los pasillos y cada recoveco del palacio. Ninguno de los dioses guerreros se encontraba ahora en el recinto y la joven supuso que todos andarian de patrulla por las zonas que le correspondia proteger debido a su rango como jarls de Asgard.
Se sento en una comoda butaca, aliso su vestido y dejo que su cabeza reposara sobre el respaldo de aquel comodo y mullido asiento. Cerro sus ojos y coloco sus pies sobre una banquetita para estar mas comoda y poco a poco se fue relajando, aunque no llego a dormirse. La joven se encontraba algo cansada y necesitaba unos momentos de tranquilidad.
Entretanto una de las doncellas de palacio se aseguro de que la chimenea continuaba encendida, corrio las gruesas cortinas de terciopelo para que no entrara corriente y tambien cerro las puertecillas que se usaban para bloquear las ventanas. Estas servian tanto de medida para combatir el atroz frio reinante en aquellas tierras y como medida antirrobo pues quien quiera que asaltara el palacio debia hacer unos destrozos terribles para poder entrar.
____________________________
Cualquier personaje es libre de pasarse por aqui.