-*Fleadhë klahijidi Armand , dahiiri, dahiiri
Tras ofrecerle la orden , Armand emprende el vuelo para poder llevar a cabo su misión. Me quedo por unos momentos mirando aquella cuchilla y su escudo maldito , volteo a ver a Saga al escuchar su pregunta y rapidmante tomo su hombro para colocarlo detrás de mi persona y servirle de apoyo. Mi mirada se torna preocupada y a la vez molesta
-Ven, aun estas débil debes volver a la cama- nos encaminamos de nueva cuenta a la cama, haciendo que se siente en esta para que asi pueda recostarse. Mi otra mano le hace entrega de aquella cuchilla para que pueda ver el símbolo de un cráneo con dos cabezas de lobo en las laterales y una espada . Sentándome cerca de su persona le miro fijamente con seriedad y preocupación
-Lo que ves ahí es el escudo de Murdock, el jinete nigromante uno de los pueblos mas sanguinarios y crueles de todas estas tierras- aguardo una pausa mirando con gran odio aquel escudo- son unos asquerosos asesinos y ellos mataron a mi hermano y a mi mentor…- desvio mi vista hacia la ventana apretando mi puño- y estoy seguro que a mis padres también
Aguardo una larga pausa perdiendo mi vista hacia el exterior de la ventana escuchando las voces de movilización de los aldeanos y soldados de Thornfield
-Ellos viven con un objetivo, exterminar a todos los que pertenecemos a la línea de sangre de la rosa, y a todo aquellos que nos apoyen y protejan-vuelvo mi vista hacia él-eso me lo dejaron muy claro aquella noche.-mis ojos comenzaron repenitamente a desbordase en lagrimas de dolor y odio al recordar aquel suceso
-Cardinale, nos adopto a mi hermano y a mi cuando asesinaron a nuestros padres, el fue nuestro mentor. Nos enseño acerca del manejo de armas y el arte del combate y la guerra. Para sobrevivir y descubrir a los asesinos de nuestros padres comenzamos a adéntranos en el negocio de espionajes y de los asesinatos a sueldo, volviéndonos así mercenarios-sonrio un tanto nostálgico secando un poco mis lagrimas- una noche, de la nada llego un gran grupo de hombres , todos ellos muy bien armados , cada uno llevaba una lanza con una cabeza incrustadaa, las cuales comenzaron a arrojar hacia nuestro refugio pero no solo fue eso…ellos hicieron uso de algo a lo que llaman polvora, provocando que estallara nuestro refugio. Logramos salir a tiempo pero afuera debíamos enfrentarnos a todo ese grupo
Silencio por unos momentos endureciendo un poco mi voz
-Peleamos con toda nuestras fuerzas y valentía , sin embargo el numero de hombres nos superaba y siendo solo tres no nos dábamos abasto. De las sombras y de manera inesperada apareció un hombre joven, quien de manera audaz capturo a mi mentor y lo derribo con tanta salvajidad contra el piso para después – aprieto los dientes mientras furica el ceño con gran ira- clavarle una lanza desde su s genitales pasando todo el interior de su cuerpo . Mi hermano y yo llenos de ira tratamos de matarle sin embargo nos capturaron, a mi me amordazaron y amarraron a un árbol en forma de cruz lanzándome flechas en mi brazos y piernas. A mi hermano lo atacaron , lo desnudaron y… -muerdo mi labio con gran furia azotando mi puño contra el colchón- ESE MALDITO LO VIOLO MIENTRAS LO MATABA LENTAMENTE DESPELLANDO SU CUERPO CON SU ESTUPIDAS DAGAS…Y YO NO PUDE HACER NADA-
Libero en un mar de llanto tan profundo y ahogante al tiempo que abrazo con gran fuerza a Saga apoyando mi cabeza sobre su pecho humedeciendo sus ropas hundiéndome por el gran dolor y la ira que sentía ante ese hombre cuyo nombre jamás se me iba a olvidar..
Aiacos
Después de un rato y tras haberme calmado libero a Saga de aquel contacto y disculpándome por haber tomado ese atrevimiento suspiro profundamente para asi finalizar mi narración
-No me explico como sobreviví, simplemente paso…-aguardo una pausa-después de matar a mi hermano aquel hombre golpeo mi cuerpo amarrado con unas gruesas cadenas gritando con gran jubilo queal fin se habai deshecho de la escoria de la Rosa, de los Elendid y después me dio a ingerir algo, el cual me hizo sentir un gran dolor en mi pecho y en todo mi cuerpo, era como si mis huesos se quebraran tan ferozmente… -vuelvo mi mirada hacia él sonriéndole brevemente - también toque las puertas de la muerte pero yo no me volvi un Banshee por desgracia…- seco lo que me quedaba de lagrimas acomodando un poco mis cabellos arropándole mas su cuerpo
-Y cuando desperté, me hallaba en una choza al cuidado de una anciana…y bueno después de 6 años heme aquí- le miro fijamente acariciando brevemente su mano – hay que estar preparados, mande a Armand a que buscara su rastro y a donde se dirigen, pero también tu hermanoy tu reino corren peligro y mas si han descubierto nuestra relacion sanguinea con el antiguo pueblo de la rosa - me levanto de la cama encaminándome hacia una mesa de la habitación , la cual tenia un tintero y varios pergaminos en blanco
-Te ayudare a que te comuniques con Dohko para que este alerta, y podría infiltrarlo a este lugar aquí , en dado caso que el quisiera venir a tu lado –le sonrio complice tomando el pergamino y el papel para dirigirme hacia él
-Debes avisarles, no hay tiempo que perder... primo
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Armando sigue el rastro de ese infeliz, rapirdo, rapido
