Las Afueras del Santuario: Rodorio

Kardia:

Me había despertado de muy mal humor hoy, primero porque es sábado y detesto levantarme temprano los sábados, segunda me daba cuenta que tenía una pila de ropa sucia que se supone debí mandar a lavar hace tres días- buscaría a los encargados del aseo para darles mi ropa- , tercera es de que ya no podía ir a dar a paseos con Sasha porque tendríamos chaperon en tooooodo nuestro viaje y eso es porque a Sisifo se le metió la idea de que conmigo corre peligro -Puff - no sabía de dónde sacaba eso si sólo fue una vez que regresamos con uno que otro rasguño por la cara-por no decir que casi nos matan, tal vez por eso pero fue hace años- no tendría porqué desconfiar de mi o ¿si?, pero lo mas importante y qie peor ponía mi Humor era que no tenía mis preciadas Manzanas para desayunar!!!!!.
Eso si era para sacarme una que otra maldición, tendría que ir a Rodorio a comprar unas cuantas y de paso a ver si me encuentro a una de las personas que ayudan con el aseo y la ropa.

Con algo de flojera empiezo a bajar las escaleras hasta el límite del satuario, me encuentro con un compañero y amigo de armas; a veces me ponía a pensar que la manera en la que nos hicimos amigos fue tanto bizarra pero estaba contento de tener a alguien como camarada y amigo.
Y ahí venia hacia mi el hombre mas pusilánime- por su veneno-,antisocial, solitario- ya no tanto-,reservado , venenozo, gallardo, hermoso, altruista y bondadoso Albafika de Picis.

Y con toda la confianza del mundo le saludo.

-Hola rosita que bueno verte -dije despreocupado y sonriente. Quizás ael no le gustaba ese apodo pero no le tomaba mucha importancia le quedaba bien a. Mi parecer.

-Necesito ir a comprar unas manzanas acompañame.

No tomé la delicadeza de preguntar si estaba o no ocuoado, yo tan solo tomé su mano y me puse a.caminar al pueblo para ir en compra de mi desayuno, afiance el agarre para que no se soltara;curioso creo era el único alcque su veneno no le surgía demasiado efecto, mi constelación tambien era venenosa.

Regresaba de hacer un recorrido por los alrededores del santuario cuando a lo lejos veo a Kardia de Escorpión bajando, verle no presagiaba nada bueno para mi persona pues aunque me agrade siempre intenta arrastrarme a sus locuras.

Respondo a su saludo con un asentimiento leve de cabeza. - Buenos días Kardia. - Respondo irritado por el apodo.

Saludo con tranquilidad intentando continuar con mi camino aun sabiendo que es en vano, por mas que intente alejarle siempre se queda y poco a poco me ha hecho añorar el tener haciendo bullicio a mi alrededor.

Siento como toma mi mano e inmediatamente y por reflejo la jalo para alejarme de su contacto, más sabiendo de antemano mis intenciones me apresa mas fuerte evitando que logre mi cometido y arrastrándome camino al pueblo.

- Kardia, voy a acompañarte, pero suéltame. -

Pido resignado sabiendo que no podre librarme de esta, cuando a mi amigo se le mete una idea en la cabeza es imposible quitársela y por lo regular tiendo a ser arrastrado por él, es curioso pero no me molesta realmente solo me preocupa su bienestar, es bueno... no estar tan solo.

Deuteros:

Regresaba del pueblo, siemore.entre.lassombras.
Tanto tiempo aislado me hacía sentir raro y desencajado, solo fui por unas cosas . Incluso debo decir que era anómalo estar sin ella.

Cuándo voy ascendiendo me escondo al oor al pequeño arconte de Leo con esa risa tan animada y alegre.
Me fije y me perdí por unos segundos en sus ojos.
No sabria decir si me vio pero ahi parado aún lo miraba bajar sonriente a encontrarse con sus amigos.

Otra presencia me hace voltear al sentirme descuerpo por el arconte de Cancer.
Lo miro, lo examino y creo ue mi mutismo y mis ojos bastan para decirle sin palabras un saludo, no era de entablar o charlar con los del Santuari.

El se puso a mi lado y al parecer se da cuenta que miraba a aalguien, él y yo teníamos cosas en común y en una amistad no dicha o parafraseada nos hicimos un poco cercanos.

Para cuando quise tomar la palabra un bullicioso Kardia hace que ambos pongamos nuestra atención en el arconte de escorpio y. El de picis ambos tomados de la mano. Al parecer a Manigoldo eso fue suficiente para captar su atención y probablemente ir tras ellos.

-Podrás hacer idiotas a otros pero a mi jamás, mi ingenuidad la deje mucho antes de dejar el pañal. Se nota como te devoras al leoncillo con esos “galantes ojazos”

El tono que emplee mi expresión  llevaba ese típico acento tosco y de poco tacto que empleaba para las palabras. La sutileza ni las palabras adornatadas jamás fueron lo mio, algo que a la gente “sofisticada “ y de “finos modales” les fastidiaba

Lástima, se pierden de mi buen  y carismático sentido del humor negro, como la mugre que llevaba  impregnada la desgastada tela de los pantalones de Deuteros. Próximamente me volveré un filántropo y le daré unos

Mi vista se perdió por un rato en la figura de aquel pequeño leoncillo que saltaba como corderito  por el sendero s para encaminarse a quien sabe dónde, espero que no sea a esa cabaña de citas que sin querer le mencione sino su tío me echara todo un sermón sacerdotal  de valores y buenos modales, aunque ahora que lo pienso  me caería bien para arrullarme rico en la siesta

-Esa fastidiosa voz solo puede ser del señor manicure escarlata

Anuncie antes de afirmar mis palabras con  una ladina sonrisa y enseguida girar un poco mi cuerpo para ver al  hablador  escorpioncito pero mi dia de fastidioso calor y  monotonía asquerosa  rápidamente se disolvió al ver tan excelsa belleza que acompañaba al bicho feo. No solo era esa hermosura varonil lo que me apendejaba sino también esa aura que mostraba para  repeler a todo aquel que quisiera acercarse asi como la expresión  seria pero que similaba a esos seres celestiales que vi alguna vez en pinturas renacentistas

Solo él podía  joder mi cordura y hacer mi dia mas que interesante

-Shh cállate  bicho, tu voz chillona dejara sordos a todos los que están alrededor

Ordene una vez que  logre quedar cerca de su persona  y taparle su bocaza por un  unos segundos, dandole un sutil empujo para que soltara  a su tan hermoso acompañante, Albafica de Piscis

Sin demora y aprovechando que aleje al ruidoso escorpión aproveche para tomar la mano diestra de Albafica, llevándola a mis labios para darle un sutil y breve beso al dorso de nívea y suave piel

-Buon pomeriggio , il mio bel signore

Kardia

Esa voz de odiosa de borracho perdido solo podía ser de una sola persona.
Sentí ese empujón por lo que me compongo rápido para quitare a picis.

-El trolero de Cáncer, alias el cangrejo apestoso/bufón/deja a mi Albafika.

Ya sé que fika no era mío pero me gustaba decir aquello, mas porque yo era el primero y el único que se atrevía a tocarlo era mi hermano aunque en realidad él fuera mas viejo que yo.
En eso noto otra persona, al parecer era el gemelo pasivo de Aspros, Deuteros de Géminis.

No me gustó para nada que le besara la mano por lo que decido poner la mía antes de que besara la de fika mas que nada porque sé como es de exagerado con lo de su veneno.

-Vaya si fuera una damisela diría que estoy alagado pero no podría decir eso menos si el que besa mi mano no es mas que le borracho y desalineado del santuario- dije en broma

Había dejado a mi amigo atrás de mí, no era que le hiciera un favor a Cancer , porque la verdad quería verle retorcerse de dolor pero lo hago mas que nada por Rosita.

-Rosita mío, ya viste, no tiene ni porte, ni elegancia, ni es guapo, por eso sé que estas con alguien como Yo que SI te puede tocar .
De imprevisto beso a albafika en los labios, por su impresión abre un poco la boca y para que parezca mas real meto mi lengua en su cavidad, sería su primer beso y no puedo decir que desde hace mucho tenía esa espina en el pecho por probar sus labios aunque fuera una sola vez.
Al terminar el beso y antes de que me clave su rosa roja en mi culo le susurro que me siga la corriente ya después si quiere me puede matar pero no me quite aún la diversión de ver la cara de ese trolero de Manigoldo.

-Bueno ManiGordo, no tenemos que ir tenemos una cita y tú nos quitas le tiempo .