Habitación de Hypnos

El camino a la habitación no es demasiado largo pero aun así no puede evitar plantearse que tiene que ver el en todo esto, el simplemente se había encontrado a un viajero herido y le había ayudado a recuperarse, y de repente se veía arrastrado por toda esa maraña de sucesos. No es que no quisiera ayudar pero mas bien era que no sabía como podía ser de ayuda. Ademas, casi no conocía a nadie de los presentes. Que derecho podía tener el de estar alli? Se sentía como realmente lo que era, un extraño. Ademas! nisiquiera conocía a ese tal Saga!. Entraron en la habitación. Oh... Ahí estaba. Siempre se lo había imaginado un poco mas... despierto.

Se giró hacia Hypnos despues de observar al joven - Que le ocurre? -

Aioros puso una expresión de pena al ver a Dohko acunar el cuerpo de su amante de aquella manera. Había varios medicamentos sobre la mesa, reconocía algunos de haberlos visto durante las visitas a las tiendas de los medicos durante la guerra pero otros eran desconocidos para el.

Era bastante duro observar todo aquello, giró hacia hypnos cuando le habló y asintió con la cabeza, su voz era totalmente totalitaria y sin darse cuenta le contestó devolviendole el saludo como lo hacía cuando perteneció al ejercito de kraken años atras.

- puede confiar en mi -

Aioros da un par de pasos hacia delante observando lo que hacían algo, miró a Saga tumbado, realmente era un chico afortunado el tener tanta gente que se preocupase por el, y no por ser el rey, sino por simplemente ser Saga. Sonrió a sus adentros con cierta envidia sana, devía de ser una magnifica persona.

desde ahí cerca le sonrió a Dohko tratando de darle animos aunque fuese de esa forma - yo me quedaré aqui no dejaré que nadie os separe no te preocupes - cogió una silla cercana y se sentó cerca, poniendo sus manos sobre sus propias rodillas inclinandose un poco hacia delante con una sonrisa - por que no me cuentas mientras algun momento agradable entre los dos? - clavo su vista en saga - seguro que a el tambien le apetece oirlo -

Aioros se rie un poco imaginandose la situación viendo como le trataba con ese cariño, realmente era agradable verlos así, escuchó hablar a Dohko en silencio sonriendole cuando decía algo gracioso y observando a saga cuando lo tocaba.

- No tienes que convencerme de eso - respondió al final - se nota, no todo el mundo tiene la suerte de tener a tanta gente cuando de el, no por su puesto, sino por quien es - le sonrió observandole el pelo a saga, este caia a un lado mientras dohko lo sujetaba en sus brazos haciendo lo que Hypnos le había mandado

- Se os ve bien juntos - Se recostó un poco en la silla dejando descansar su espalda, su arco y su karkaj reposaban al lado de esta en el suelo

Aioros se rió al ver a Dohko mirarse con esa cara de confusión - me refiero a que haceis una bonita pareja - continuó riendose de forma relajada cruzandose de brazos mientras esperaba a que Hypnos regresase de hacer lo que tuviese que hacer.

- m? - lo siguiente lo pillo un poco desprevenido, el pensaba irse después de que pasase todo aquello, volver a su casucha, con su baúl lleno de cuchillos oxidados que reparar y con su cesta y su mesa uniplaza. Enseñarle a cazar significaría tener que quedarse mas tiempo pues como mínimo habría que esperar a que por lo menos el joven se recuperase de sus heridas. Lo meditó un poco, dudoso fue a decir que no lo tenía seguro pero entonces los miró y quizás fue ese sentido fraternal que tenía que le llevó a responder así - je, si claro, si el quiere - sonrió