Sus caricias me relajan y sus palabras hacen que mi corazón se acelere a un ritmo vertiginoso, con mi mano puedo sentir el latir de su coraón, no se que decir o hacer en este momento, la emoción me envarga me ha hecho un regalo demasiado valioso, no podria haber tenido mas bello amanecer que este.
—Tu corazón late por tu voluntad Saga, no he hecho mucho pero, es el mejor regalo que podrian darme, no me importa como o lo que tenga que hacer, lograré que tu corazón sane, lo mereces, mereces una vida feliz... voy a darte todo lo que necesites para ser feliz... prometo cuidar tu corazón.— Susurro suavemente acariciando su pecho.
Mi corazón late demasiado acelerado, siento como si quisiera salirse de mi pecho. —Mi corazón te fue entregado hace mucho tiempo. — Susurro antes de besarle.